Fabulous!

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domingo, 18 de septiembre de 2016

Lecturas: Cenital de Emilio Bueso


Hace un par de días que acabo de terminar de leer Cenital, novela distópica escrita por Emilio Bueso (Castellón, 1974). Me ha gustado bastante. Mucho.  Por varios  motivos, aunque el principal, es el ambiente realista planteado por una novela que parece, en muchos aspectos, desalentadoramente cercana. La propuesta del autor es muy valiente y, en mi opinión, muy sensata. Ese apocalipsis energético generado en la crisis económica es inquietante. Y el comportamiento de la humanidad ante la catástrofe, tristemente previsible (o casi). Gran novela que plantea un debate de fondo acerca de cómo estamos viviendo en la actualidad y de los cambios serios que necesitaría la sociedad. Recomendable para todo el mundo.



Bueso es ingeniero de profesión, escritor que no puede vivir de sus creaciones literarias (bendito país este, donde lo mediocre triunfa y lo bueno languidece), por muy buenas que sean. Es uno de los autores (si no el que más) más valorados del género fantástico en la actualidad y ha fichado por la editorial Valdemar (referente fantástico en España) para publicar su última novela, Extraños eones, ambientada en la mitología creada por ese genio llamado Howard Phillips Lovecraft. Aún no ha caído en mis manos, pero no tardará, teniendo en cuenta el placer experimentado con Cenital. Hacía muchísimo tiempo que la literatura fantástica en castellano no me resultaba tan atractiva. Un autor a seguir pero, sobre todo, a leer.

viernes, 16 de septiembre de 2016

25 años de Nevermind de Nirvana

Icónica portada con un mensaje plenamente vigente
El próximo 24 de septiembre se cumplen 25 años (¡cómo pasa el tiempo!) de la publicación de Nevermind de Nirvana, "el disco que lo cambió todo" (según la revista Spin). No estoy seguro de si lo cambió todo, pero, desde luego, cambió las reglas del juego en el panorama musical de un modo que no se ha vuelto a ver desde entonces.

Hace 5 años, se publicó una edición "de luxe", bastante completita, que creo que será la definitiva. Todo el que no la tenga ya, que se haga con una copia: incluye el disco tal y como se editó (que ahora comentaremos brevemente), la mezcla alternativa (Devonshire mixes) que se desechó, así como demos y directos de la época.


Con Nirvana, el underground se hizo mainstream y el llamado (por la industria y la prensa musical) grunge llenó la estanterías de las tiendas de discos de todo el planeta, pillando a medio mundo con el pie cambiado.

Además de Nevermind, ese mismo año se publicó el "Black album" de Metallica (que popularizó el heavy metal a unos niveles desconocidos). También salieron al mercado los dos volúmenes de Use your illusion de Guns 'N Roses. O sea, que no estamos hablando de unos años de sequía en lo que a creatividad musical se refiere.


Pero 1991, será el año de la eclosión de Nirvana y del grunge. Antes de esta fecha, ya estábamos asistiendo a la popularización de la música alternativa: son los años del crossover de bandas como Faith no more, los hoy masivos (y completamente repetitivos) Red Hot Chili Peppers, Fishbone o Living Colour entre otros. Los grupos que dominan la industria musical son las bandas del (mal llamado) hair metal, grupos de hard rock como Poison, Mötley Crüe, L.A. Guns, Ratt y muchísimos más llenaban las portadas de las revistas musicales de Rock de medio mundo.

Cuando salió Nevermind, todo ésto sonó caduco y viejo. Carreras enteras (muy prometedoras) se vieron cortadas de repente. Sólo interesaba el grunge y lo que se podía asociar a este género. Todo lo que venía de Seattle (cuna del grunge) tenía eso sello de "calidad" que buscaban. Pero Nirvana sólo hubo unos.

Y Nirvana eran Kurt Cobain, Krist Novoselic y Dave Grohl. Antes de Grohl estuvo Chad Channing a las baquetas. Y también, brevemente, formó parte de Nirvana Jason Everman (segundo guitarrista; el tipo con más mala suerte del Rock ya que fue echado de Nirvana y de Soundgarden antes de que éstos obtuvieran el éxito masivo). E incluso podríamos mencionar a Pat Smear (que fue segundo guitarrista en los momentos finales de la banda).  Bueno, Cobain, Novoselic y Grohl. Estos tipos son los que grabaron Nevermind (y los posteriores discos de la banda), por lo que nos referiremos a ellos como Nirvana.

Nevermind es un disco excelente. Lleno de rabia, pero con melodías. Con unas letras incisivas que criticaban muchos aspectos de una sociedad decadente. Y eso era fundamental para unos adolescentes (iba a cumplir 14 años) que nos enfrentábamos a lo que fuera, lleváramos razón o no.  Cuando vi el vídeo de Smells like teen spirit en la televisión española (en La 2) nos quedamos flipados. Estos chicos sonaban enfadados y no necesitaban de hacer solos de guitarra. El caso, es que, al poco, nos hicimos con el disco y, enseguida, se puso de moda. Parecía que Nirvana era justo lo que estábamos esperando. Lo que no me gustó, fue que se hicieran tan masivos. En la época, lo que alcanzaba el éxito masivo lo veía como algo que no era auténtico, algo falso. ¡Qué equivocado estaba!

El disco estaba publicado por un sello grande (Geffen Records) y fue producido por el entonces casi desconocido, Butch Vig, cuya tarea fue la de hacer menos crudo el disco grabado por la banda (algo que ellos criticaron abiertamente). Sin embargo, el disco sonaba y suena de un modo magnífico a día de hoy. Es cierto que la versión "cruda" es mejor, en mi humilde opinión, pero lo que se publicó en 1991 apabulló a las masas (ha vendido unos 24 millones de discos).

Smells like teen spirit (el título está inspirado en un anuncio de desodorante) es una versión del More than a feeling de Boston en su estructura musical. Fue el primer single del disco y el que lanzó a esa espiral de fama a Nirvana. Esa misma fama que acabó con la mente de Cobain. El resto de los temas, ya sean Come as you are, Stay away, Territorial pissings, Breed, Lithium o cualquiera de las 12 canciones que componían el disco seguían en esta línea y llenaron mi cabeza durante muchos días.

Pronto me vi vistiendo al modo grunge (es decir, pantalones rotos, ropa vieja -usaba una chaqueta de ante de mi padre; camisas de franela de cuadros, jerséis de lana de rayas -a lo Freddy Krueger; barba y pelo largo descuidado). Y como yo, la amplia mayoría de la muchachada mundial que cayó bajo la influencia del grunge. Supuso el último movimiento musical masivo.


Pero ¿qué es el grunge?. Según los medios de la época, por grunge se entendía a la música que venía de Seattle, a ser posible en los grupos que publicaba el sello Sub Pop Records (recordar que en Murcia hubo una tasca o pub llamado Sub Pop), y que hacían una música que tenía evidentes influencias del Punk, del Rock alternativo, del Hardcore americano y con influencias de los '70. Además de Nirvana, los grupos que definieron el grunge fueron Pearl Jam, Alice in chains, Soundgarden, Screaming Trees, Mudhoney, Melvins, Tad... Me dejo muchos nombres. El sello Sub Pop estaba en el origen de muchas de estas bandas, que además, eran producidas por Jack Endino o Steve Albini (preferentemente).


Una cosa es cierta: la música que surgió con el grunge tiene una calidad indudable y ha dejado auténticas obras maestras. Fue un fenómeno que duró poco, ya que se fue diluyendo con la muerte de Cobain (que se suicidó en 1994 -ahora me acuerdo de que estuve a punto de ir a ver a Nirvana en uno de sus últimos conciertos, gira de In utero, y no lo hice). Las grandes bandas, como Soundgarden o Screaming trees, se separaron o fueron aplazando sus discos (el caso de Alice in chains por los problemas con las drogas de Layne Staley -que moriría por sobredosis en 2002).


Tras el suicidio de Cobain, la popularidad de Nirvana se disparó aún más. Durante unos años, era imposible no cruzarse con varias decenas de jóvenes que llevaran algún elemento con su cara o el nombre de Nirvana. Recuerdo que lloré por Cobain y le hicimos un pequeño homenaje musical el día que nos enteramos. Pero después, aborrecí todo lo relacionado con ellos. No soportaba la explotación de su imagen y, de hecho, no volví a escuchar a Nirvana hasta la reedición de Nevermind del 20 aniversario. La música y el mensaje allí contenidos siguen plenamente vigentes a día de hoy.

Con el triunfo de Nirvana muchas de estas bandas firmaron por majors (sellos disSoundgarden, Pearl Jam y Alice in chains se hicieron masivos igualmente (y por méritos propios evidentemente). El resto, no tanto. Lo que está claro, es que el éxito de Nirvana dejó un panorama musical mucho más abierto que nos dejaría un gran número de discos memorables a lo largo de la década de los '90 (y de principios del '00). Una última era dorada llena de nombres irrepetibles y de momentos de creatividad no superados.
Puede que no lo cambiara todo, pero rompió muchas barreras y prejuicios musicales. Un disco imprescindible que captura el espíritu de una época.




jueves, 8 de septiembre de 2016

Superfly de Curstis Mayfield, probablemente la mejor banda sonora de todos los tiempos

Portada original del disco y contraportada con imágenes del film



Sinceramente creo que no hay mejor banda sonora que Superfly de Curtis Mayfield. Estamos hablando de un pequeño clásico del Blaxploitation (próximamente por este blog) dirigido por Gordon Parks Jr. en 1972 con Ron O'Neal de protagonista absoluto, encarnando a un tipo bastante indeseable pero con indudable carisma (impresionante el crucifijo que lleva colgado al cuello al que destina usos nada religiosos).

El característico estilo de Priest (Ron O'Neal). A la izquierda, Curtis Mayfield al fondo del plano tocando la guitarra.



















El film es bastante entretenido y ha ejercido alguna influencia en las películas de gángsters negros posteriores, sobre todo, por su imagen poderosa. Sin embargo, la productora no quedó muy contenta, por la mala imagen que daba el protagonista, que no era castigado al final.

Distintos carteles originales de la película

Su éxito entre el público de color (con un presupuesto que no llegaba a los 100.000 $, recaudó más de 6 millones -aquí incluimos las cifras de alquileres) animó a una segunda parte titulada Superfly TNT dirigida por el mismo O'Neal que, perosonalmente no he visto. Tras esta secuela, no hubo más Superfly.

Pero lo que sí que ha perdurado en el tiempo es esa pedazo de obra maestra en forma de música para la película que realizó un Curtis Mayfield en estado de gracia. Temas como Pusherman, Freddie's dead, Little child o No thing on me (Cocaine song) son clásicos que por sí solos, justifican carreras discográficas enteras. Soul, R&B, Funk mezclados con una producción estupenda realizada entre 1971 y 1972 que desembocó en lo que sería el sonido definitivo de las películas Blaxploitation (con el permiso de Shaft, cuyo soundtrack realizó Isaac Hayes, quien lograría un merecidísimo Oscar de la Academia de Hollywood unos años antes).


Encontrarlos aquí reunidos en un solo disco es, sencillamente, memorable. Yo tengo la versión sencilla (en Cd) con la música que salió en la película pero, hace unos años, se reeditó el disco remasterizado y con versiones y mezclas alternativas de varias canciones, conteniendo el libreto las letras y una pequeña historia de cada canción de este disco imprescindible.