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Haters back off!!!!
El pasado 10 de octubre se cumplían 30 años de la desaparición del gran Orson Welles, actor, director, guionista y productor de cine entre otras muchas cosas. Nacido en 1915, fue un niño prodigio que sorprendió al mundo con su narración, en 1938, de "La guerra de los mundos" de H. G. Wells. Las personas que estaban escuchando se pensaban que, en realidad, estaba ocurriendo una invasión alienígena.
Hasta hace pocos años, la prestigiosa revista de cine "Sight and sound" tenía a la opera prima de Welles en el mundo del cine, "Ciudadano Kane", como la mejor película de todos los tiempos. Hoy, se ha visto desplazada de ese primer lugar por "Vertigo" del británico Alfred Hitchcock. Primera, segunda, tercera ¡qué mas da! sigue siendo una de las mejores películas jamás realizadas, con unos avances en varios aspectos en la manera de hacer cine.
Sin embargo, Hollywood no le perdonó a Welles que "Ciudadano Kane" fuera una fracaso de taquilla. Desde entonces, perdió el control creativo y se dedicó a participar en muy variopintos proyectos. También, podemos decir que se convirtió el el primer cineasta independiente de todos los tiempos, llegando a recalar a nuestro país. De hecho, tanto amaba nuestra "piel de toro" que hizo que sus cenizas fueran enterradas en la malagueña localidad de Ronda, en la finca de su amigo torero Luis Miguel Dominguín.
El caso es que la figura de Welles merece un lugar destacadísimo en la producción cultural del siglo XX como uno de los mayores genios (o autores) de todos los tiempos, ya sea dirigiendo, actuando, escribiendo o cualquier cosa.
Como Harry Lime en "El tercer hombre" (1949, Carol Reed). Una actuación inolvidable en la considera como mejor película británica de todos los tiempos.
Unos jovencísimos Manowar firmando con su propia sangre su contrato discográfico
Mucho antes de conocer "Ciudadano Kane", "Campanadas a medianoche", "Fraude", "El cuarto mandamiento" o, mi favorita, "Sed de mal" mi primer acercamiento al hombre fue un tanto extraño: a través del Heavy Metal. Y es que Welles acudía donde era reclamado, como sucedió con el grupo Manowar, que le pidió que recitara unas letras para una canción (Dark avenger) de su primer disco "Battle Hymns". Unos años más tarde, para el quinto álbum de la banda, "Fighting the world", reaprovecharon la colaboración de Welles para el tema Defender. La profunda voz del gran (en todos los sentidos) Orson Welles le da un tono épico aún mayor a la canción. Este fue mi primer contacto con el maestro.
Manowar y Welles en el estudio de grabación
Desde aquí este pequeño homenaje a un personaje imprescindible, uno de los más grandes, sin ninguna duda. Orson Welles, genio y figura.
Hoy me gustaría hablar de uno de mis ídolos vivos y en activo, aunque por poco tiempo, ya que planea jubilarse tras más de 60 años diseñando automóviles. Y es que, cuando me preguntaban qué quería ser de mayor, yo respondía, diseñador de coches o carrocero. Todavía conservo los 2 ejemplares de la revista Volante que compró mi padre encuadernados, donde aprendí con los diseños de los mejores. Entonces, no sabía nada, pero esos coches me impresionaban y, como buen chico criado en los años '80, les añadía con bolígrafo (cuando no lo tenían) las sagradas palabras de "turbo", "2000" o "GT".
El nombre de Giugiaro me viene a la mente por los recordatorios relacionados con Regreso al Futuro y la famosa máquina del tiempo que aparece en las películas, el Delorean, que fue un automóvil real, de producción, cuyo diseño es obra de Giugiaro y que se convirtió en un icono, no solo para los amantes de los coches sino para todo aquel que se crió en los '80 y vio la retro-futurística saga.
Giugiaro con John Delorean, fundador de Delorean Motor Company
Pero este señor nacido en el Piamonte italiano en 1938 no sólo ha dibujado el Delorean, sino también algunos de los coches más bonitos de todo el siglo XX (junto con otros grandes de este negocio como Bertone, Pininfarina o Zagato). Por ello, tiene en su poder el título de Car Designer of the Century otorgado por un amplio jurado de especialistas en el tema. Y es que Giugiaro y su empresa Italdesign, no sólo diseñaban, sino que creaban esculturas rodantes, algunas de las cuales se pueden ver en algunos museos de arte, tal y como se merecen
Bocetos para el Alfasud
Bocetos de primer Golf
Algunos de los automóviles que han salido de su mano (siempre empieza los trazos de un diseño con papel y lápiz) han sido:
El maestro con algunos de sus trabajos favoritos
El primer Volkswagen Golf (aparecido en 1974 y que cambió el estilo de la marca)
El primer Seat Ibiza (sobre un diseño para el Golf que fue deechado)
El prototipo único (one-off) Maserati Boomerang (que llegó a circular por España en los '70)
El Lotus Esprit (su diseño apareció en el film de Bond La espía que me amó)
El Lancia Delta (todo un icono del mundo de los rallies y con una gran habitabilidad interior)
El Fiat Panda (clásico inmortal de los pequeños coches urbanos)
El BMW M1 (el mejor deportivo y el más bonito creado por la casa alemana)
El Alfa Giuletta GT (una lección de diseño deportivo para una berlina de pequeño tamaño)
Y estos son sólo algunos de sus mejores obras.
Alfa Giuletta GT
BMW M1, parece mentira que tenga casi 40 años
Una pena que su extraordinario diseño se viera afectado por una deficiente calidad de fabricación y un motor de escasa potencia que no estaba acorde a la imagen que transmitía
El clásico urbano también fue obra suya
El Seat Ibiza de primera generación
James Bond siempre conducía Aston Martin pero el productor de "La espía que me amó" quedó fascinado con el diseño del Lotus Esprit y lo incluyó en la película en un modelo que se transformaba en submarino
El primer Golf estrenó un diseño que se continuó en los años posteriores y fue muy imitado
Automóvil legendario. Hasta nuestro actual rey, Felipe VI tuvo uno
Logotipo de Italdesign, la empresa fundada por el maestro, hoy integrada dentro del grupo Volkswagen
Boceto dinámico del Lotus Esprit
El espectacular Maserati Boomerang, prototipo único que estuvo circulando por España con matrícula de Valencia. Hoy, un coleccionista lo guarda en su garaje a cambio de más de 3 millones de euros.
Hoy es un día bastante triste para mi. El motivo, saber de la muerte de ese gran escritor que era Henning Mankell.
El primer libro suyo que leí fue "Los perros de Riga" y, desde entonces, he despachado casi todos los casos protagonizados por el personaje que le dio fama a Mankell: el inspector de la policía sueca en la ciudad de Malmö, Kurt Wallander. Personaje de luces y sombras, pero efectivo agente capaz de resolver unos casos criminales que nos hablan de un mundo en transición tras la caída del muro de Berlín.
La trascendencia de este personaje le llevó a la pequeña pantalla en dos ocasiones, la última, hace apenas un par de años con Kenneth Brannagh como protagonista de una mini-serie emitida por la BBC.
Pero su obra iba mucho más allá de Wallander. A este respecto, me encanta "El chino", otra novela sobre un mundo cambiante. En este caso, se trata de la globalización y el neocolonialismo a través de un viaje en el tiempo con un terrible asesinato como telón de fondo.